Ayer caminaba entre líneas.
Antes me encantaba correr por las estanterías sintácticas, sin prestar especial atención a nada más que la acción de correr.
Después miré hacia arriba boquiabierto, allí estaba.
Más bien, siempre estuviste ahí arriba, simplemente nunca me paré a mirar.
Siempre vagaba solo, caminando, corriendo, saltando...
Entonces me cansé de correr, y me senté. Entonces miré arriba.
Arriba, abajo, dentro, qué importa?
Tal vez fue por eso. Porque estaba cansado. Pero me aferré.
Me senté, me detuve en ese mar de movimiento, y observé.
Aprendí.
Yo ya no volví a ser yo.
Tú ya no volviste a ser tú.
Me volví a levantar, abandoné ese punto y seguido.
Todos los puntos seguidos son descansos.
Respira hondo.
Este es aparte.
Yo y tú estamos sentados ahora, no?
Aunque tengamos ese interrogante encima del punto...
Aunque tengamos este espacio incómodo entre nosotros.
Porque "nosotros" nos abarca y nos junta.
Porque al fin y al cabo, estamos en la misma línea, aunque al principio no lo estuviésemos.
Me siento para escribir esto.
Porque sé que va a haber un punto y seguido importante en nuestras vidas pronto.
Pero esta línea nos une.
Porque tu y yo estamos sentados ahora, no?
Aunque tengamos un interrogante encima del punto...
No hay comentarios:
Publicar un comentario